A partir de mañana, los vecinos de El Timbó Viejo podrán disfrutar de una nueva plazoleta. Pero la construcción este espacio no fue producto de un plan de obras públicas ni de un programa estatal. Los trabajos corrieron por cuenta de un poblador de la zona, quien decidió cumplir el sueño de su hermano mellizo, fallecido meses atrás luego de haberse contagiado de covid-19. "Con esto, su mentalidad seguirá viva; y su corazón, también", aseguró Alfredo Anastacio Pérez a LA GACETA.
La plaza llevará el nombre de "Héctor Eudoro Pérez", quien era profesor de educación física en la escuela de la zona. Será habilitada este sábado, a partir de las 21, con un evento que incluirá un festival folclórico, un desfile gaucho y un "Papá Noel" que regalará golosinas a los niños, entre otras actividades que se desarrollarán en el lugar, situado en la intersección de las rutas 318 y 312.
"El terreno está en nuestro predio, que es una herencia de mi abuela. Pero la plazoleta estará a disposición de todo el mundo. Es un reflejo de lo que mi hermano era como persona", detalló Alfredo.
El hombre de 58 años remarcó que Héctor había dado inicio a este proyecto. "Sin embargo, es un legado que había quedado inconcluso por su partida. Él siempre pregonó por el crecimiento de El Timbó", afirmó.
Hace algunos meses, el profesor de educación física contrajo covid-19. Según Alfredo, estando internado se contagió con un virus intrahospitalario, y finalmente perdió la vida sin lograr dejar inaugurada la plazoleta. "Por eso, yo he cumplido su sueño de realizar esta obra. Hice todo con mis manos. Y será para todo el mundo que quiera disfrutarla", aseguró.